El paisaje se construye desde adentro.

Aline Petterson

lunes, 21 de noviembre de 2011

Eterno inconsciente



Detrás de cada puerta hay un mundo nuevo…

Noviembre siempre fue un mes de tragedias, hasta que en uno de sus días llegó el amor detrás de unos ojos oscuros llenos de inocencia y verdad. Entonces inició mi aprendizaje. Y hoy en uno de esos días de noviembre, aun cuando mi aprendizaje no ha terminado, puedo mirar al horizonte y sonreír con la fuerza y la esperanza de quien ve por primera vez la vida. Poesía para la vida...


Las palabras perdidas

Alguien descifra la escritura de la lluvia y sin embargo no puede escapar.

Un alud de imágenes nos extravía la palabra; acudimos al grito y al llanto, a veces a la indiferencia, pero sabemos que necesitamos de la guerra para ser inocentes.

Todo lo ha ofrendado la ceniza.

Desde que desterramos a la noche desaparecieron las más profundas alianzas y nuestros perseguidores pueden encontrarnos.

Una herida siempre recuerda la vida, todo nacimiento procede de su túnel. Un árbol arde en nuestros ojos de agua.

La verdad –es decir lo prohibido–, impone su reino de terror... y hemos decidido habitarlo con las manos entrelazadas.

Creímos que la poesía nos enseñaría a morir...

Persistimos... Con frecuencia hacemos la extraña sonrisa del miedo. Si huimos, la soledad convertirá a alguien en víctima. Por eso la palabra se pasa de mano en mano para construir una morada invisible.

A veces para sobrevivir renunciamos al conocimiento.

Y cuando todos duermen escribimos... Pero un poema es el fósil de un sueño, el cadáver de un dios...

¿Aún podremos salvarnos?

(La palabra Liberada) Gonzalo Márquez Cristo

2 comentarios:

  1. Quisiera creer que sí, que aún podemos salvarnos. Seguir creyendo en el poder sanador de las palabras. Aun así, creo que hace falta más. Más que palabras hermosas o certeras para sanar.

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  2. Igual pienso lo mismo, sin embargo las palabras pueden llegar a ser ese bálsamo que se necesita para continuar...

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